Nuevas situaciones, nuevas amistades, nuevas personas y así como muchos llegan, otros se van. Creo que es parte de la ley de la vida y es la forma en la que uno va depurando aquello que debe y no debe quedarse con nosotros. En este caso lo vi reflejado al instalar macOS Sierra en la Mac (no cuestionen mis analogías)
Ayer fui con un amigo a instalar MacOS Sierra desde cero, la sintomatología de su máquina es que estaba lentísima y los ventiladores prendían desde que encendía la máquina – mi cuate aún mantenía Snow Leopard en su Mac. Todo iba perfecto, sin embargo no pude hacer la instalación limpia desde el principio porque se presentó un fenómeno que la verdad, ocurrió porque se me pasó hacer un paso previo: en lugar de formatear el disco duro, yo de hábil, solo actualice la partición que ya tenía Snow Leopard y toda la basura que tenía, continuo afectando el rendimiento de la máquina. Como resultado, tuve que hacer de nuevo el proceso, formateando el disco duro e instalando y configurando el SO desde cero. Puedo constatar y mi cuate creo que también, que hasta este momento (24 horas después del procedimiento) no hay queja alguna – salvo algunos archivos perdidos como sus citas en el Calendario y sus Favoritos de FireFox y Safari que se le olvido respaldar (si, existen en TimeMachine pero esas aplicaciones viejitas ya no corren en Sierra, ups...)
Quizá sea un mal ejemplo, pero encontre una analogía con la vida: si no hacemos un format de nuestro disco duro - llámese sentimientos, vicios, sugestiones, ideas y/o cosas que traemos atoradas - salimos de una mala racha “renovados” pero aun cargando la basura que nos afectó antes (y termina como depresión, enfermedad, obsesión, workaholismo o como quieran llamarle). Ayer aprendí que lo que necesitamos es un formateo completo de nuestro ser y empezar desde cero en todo, ya sea procesando toda esa basura que traemos o simplemente desechándola, porque tal como en la Mac, podremos tener excelentes recursos, pero los estamos desaprovechando.
Después les escribo de la experiencia de instalar Windows en mi Mac con todos sus pormenores, será quizá otra analogía de vida.
Saludos a todos.
Actualización de mi amigo (25/10/2016)
Me comenta que en su caso, lo ve de esta manera: Él, aferrandose al pasado (Snow Leopard) sin darse cuenta que el presente (Sierra) tiene cosas sorprendentes que ofrecer.